La Luz Prestada – Un antiguo relato chino sobre La Gratitud

A continuación la historia de La Luz Prestada. Un antiguo relato chino. 

¡Bienvenidos a un nuevo post en nuestro blog! Hoy quiero compartir con ustedes una historia que, aunque milenaria y proveniente de lejanas tierras chinas, tiene una resonancia increíble en nuestro tiempo y en nuestras vidas. Se trata de «La Luz Prestada», un relato que nos invita a reflexionar sobre el valor de lo que tenemos y cómo a veces, sin darnos cuenta, podemos perder de vista lo esencial por enfocarnos demasiado en lo que nos falta.

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 La historia de «La Luz Prestada» Texto Original

Hubo una vez una mujer muy, pero que muy pobre, que trabajaba en un taller. Las obreras llevaba cada una una lámpara de aceite para iluminar la estancia. Pero esta mujer, al ser tan pobre, no tenía dinero para comprar aceite.Un día, las otras mujeres decidieron expulsarla del taller.

– Si no vienes con tu lámpara encendida, como las demás, no puedes estar aquí. No es justo que nosotras traigamos una y tú no.

La mujer, apenada, dijo:

– Es cierto, yo no tengo dinero para comprar aceite para la lámpara, y por eso vengo todos los días antes, barro el suelo y os arreglo los asientos para que estés cómodas. A cambio, vuestras lámparas iluminan la estancia lo suficiente. ¿En qué puede molestaros que yo use la luz de vuestras lámparas a cambio de mi trabajo extra?

Las compañeras, avergonzadas, le dieron la razón y decidieron que debía quedarse en el taller.

El Mensaje de «La Luz Prestada»

Imagínense a una mujer extremadamente pobre, trabajando arduamente en un taller junto a otras obreras. Cada una de ellas debía llevar su propia lámpara de aceite para iluminar el espacio de trabajo. Sin embargo, nuestra protagonista, debido a su pobreza, no podía permitirse el lujo de comprar aceite. Un día, sus compañeras, frustradas por la situación, decidieron que no podía seguir trabajando con ellas si no aportaba su propia luz.

La respuesta de la mujer fue un verdadero ejemplo de dignidad y sabiduría. Admitió no tener dinero para el aceite, pero recordó a sus compañeras que ella llegaba temprano cada día para barrer el suelo y arreglar los asientos, asegurándose de que todo estuviera cómodo para ellas. Su trabajo extra compensaba la luz que tomaba prestada de las lámparas de las demás. Conmovidas y avergonzadas por su inicial dureza, las compañeras acordaron que debía quedarse.

Lecciones de «La Luz Prestada»

Esta sencilla pero poderosa historia nos enseña que es fácil perder de vista lo que realmente importa cuando nos centramos demasiado en lo material o en lo que nos falta. ¿Cuántas veces hemos dejado de apreciar lo que tenemos por estar mirando hacia lo que no está en nuestras manos?

Aquí van algunas estrategias que pueden ayudarnos a cambiar esa perspectiva y valorar más nuestra vida:

1. Practica la gratitud:

Tómate un momento cada día para pensar o escribir sobre lo que te sientes agradecido. Este simple acto puede cambiar enormemente tu enfoque hacia lo positivo.

2. Enfócate en el presente:

Vivir lamentando el pasado o preocupándose excesivamente por el futuro puede robarnos la belleza del ahora. Intenta vivir el momento y disfrutar de lo que está sucediendo.

3. Evita compararte constantemente:

Las comparaciones pueden llevar a la insatisfacción crónica. Concentra tu energía en tus propios objetivos y logros en lugar de mirar lo que otros poseen o han alcanzado.

4. Reconoce tus fortalezas:

Haz una lista de tus habilidades y logros. Esto te ayudará a valorarte más y a sentirte orgulloso de tus capacidades.

5. Controla tus pensamientos negativos:

Cambia los pensamientos que te centran en la carencia por otros que resalten lo que sí posees.

6. Practica el desapego:

Aprender a disfrutar las cosas sin necesidad de poseerlas puede liberarte y permitirte valorar lo que ya tienes.

7. Ayuda a los demás:

Dedicar tiempo o recursos a quienes tienen menos puede ser una poderosa forma de poner en perspectiva nuestra propia situación.

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Reflexión final sobre La Luz Prestada

Espero que esta historia y estas estrategias te inspiren tanto como a mí. ¿Te has encontrado alguna vez enfocándote demasiado en lo que te falta, olvidando apreciar lo que ya está en tu vida? ¿Cómo manejas estos sentimientos?

Estoy deseando leer tus experiencias y pensamientos en los comentarios. ¡Gracias por acompañarme en esta reflexión!

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4 comentarios en «La Luz Prestada – Un antiguo relato chino sobre La Gratitud»

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